Un organizador, un goleador y, si es posible, un interior para la banda derecha, son las prioridades del club para reforzar el equipo.
Un centrocampista organizador y un goleador son las prioridades del cuadro técnico del Sporting para reforzar el equipo. El atacante elegido es Nino, a quien ya quiso Manuel Preciado en otras dos ocasiones, pero sin poder cumplir su objetivo por las limitaciones económicas del club gijonés.
El jugador almeriense está ansioso por regresar a Primera División y le agrada la posibilidad de coincidir con Preciado. Sin embargo, el obstáculo es el Tenerife, ya que el club isleño, sorprendente colista de Segunda División, es reacio a permitir la marcha de su goleador, aunque tiene el inconveniente de que mantener el importe de su ficha en esta categoría resulta complicado.
El Sporting encargó la negociación al intermediario gijonés Gelu Rodríguez, quien ya contactó con el futbolista. El importe de la ficha que el almeriense tiene actualmente asciende a unos 720.000 euros, a los que habría que sumar una cantidad en concepto de traspaso. El club gijonés propone una fórmula mixta, en función de si conserva la categoría.
Otra opción que se comentó fue la del 'gigante' Carew, ex del Valencia, que ahora milita en el Aston Villa, con el que aún no se estrenó como goleador. También se valora a otro jugador de envergadura, como es Zigic, del Birmingham City, con el que lleva sólo dos goles anotados en los dieciséis encuentros en los que participó. Ambas alternativas parece que resultan excesivamente caras.
La salida de Matabuena, Portilla y Landeira deja en el centro del campo a Rivera y Eguren, con el juvenil Sergio como complemento, así como a Iván Hernández, que puede adaptarse de forma ocasional al puesto. Emilio de Dios y José Manuel Pernía analizaron numerosos vídeos de futbolistas centroeuropeos, pero el director deportivo dispone de datos más concretos, ya que realizó varios viajes en lo que va de temporada a Portugal, Chipre, Austria y Alemania.
Algunos de los jugadores observados sólo se analizaron en grabaciones de partidos, lo que hace dudar a los técnicos, así como a otros que estaban en cartera en otras ocasiones, como es el caso del portugués André Castro, quien sólo jugó un partido, en el que tuvo el seguimiento de De Dios en Oporto. La inactividad es el inconveniente para intentar su contratación.
Las limitaciones económicas juegan un papel fundamental. La banda derecha necesita un jugador más específico, pero una tercera incorporación obligaría a hacer muchos cálculos.
Parece complicado que antes de la próxima semana pueda llegarse a algún acuerdo, pero los frentes están abiertos.
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