Comenzó su carrera en 1995, en Segunda División "B", con el filial del RCD Mallorca y consiguió el ascenso a Segunda División en la temporada 1997/98. Tras un año en la categoría de plata en el que los baleares no pudieron conservar la división, fichó por el Cádiz CF, lo que supuso su regreso a Segunda "B".
En 2001, tras dos campañas con el Cádiz, fue contratado por el Real Sporting de Gijón, que militaba en Segunda por aquel entonces. Sastre, habitual interior derecho, comenzó a ser utilizado como lateral en el club asturiano; además, se convirtió en capitán del equipo en 2006 y consiguió el ascenso a Primera División en la temporada 2007/08. A sus casi 33 años, en agosto de 2008, debutó en la máxima categoría del fútbol español, disputando 30 partidos. A partir de la campaña siguiente, perdió protagonismo en las alineaciones en favor de Alberto Lora.
El 15 de mayo de 2011 disputó su último partido con la camiseta del Sporting en El Molinón, contra el Racing de Santander, tras diez temporadas y más de 300 partidos oficiales como jugador rojiblanco. En los prolegómenos del encuentro se le entregó una placa como reconocimiento a su trayectoria en el club y, al comienzo de la segunda parte, fue sustituido con una gran ovación por parte de los aficionados.
Sastre llegó al Sporting hace 10 años y aquí ha vivido momentos de todos los tipos tanto de alegría como de tristeza, pero al final con los que te quedas son los momentos alegres como el ascenso a primera o la victoria el el Bernabeu.
Los compañeros de Rafel le definen como una persona trabajadora en el día a día y luchadora, es de destacar la entrega de Sastre también en estos 2 últimos años a pesar de pasar casi todos los partidos en el banquillo, además definen a Sastre como una sensacional persona.
Todo homenaje que se le rinda a este jugador resultará poco por todo lo que hizo por el Sporting, a pesar de no ser una estrella mundial como Cristiano Ronaldo por ejemplo Sastre siempre a tirado del equipo en los malos momentos y en los momentos más importantes como el partido ante el Barcelona de este año en el Molinón donde realizó un impecable partido. Sastre no sería un jugador que destaque por sus goles o por su desborde al atacar sino por la contundencia y la solidez defensiva y sobre todo como capitán en el vestuario del Sporting.
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